Si hablamos de especias que se amen, tenemos que hablar de la cúrcuma y la pimienta.
La curcumina contiene polifenoles, unas moléculas que actúan a escala celular en la inflamación y la oxidación, y reducen los efectos de algunas enfermedades como la artritis , la ansiedad, los niveles elevados de grasa en sangre, o el síndrome metabólico.
La curcumina por sí sola tiene una mala absorción durante la digestión, y un metabolismo y eliminación rápidos, por eso se ha observado que hay algunas sustancias como la piperina que aumentan la biodisponibilidad de esta especie, es decir, ayudan al organismo a absorberla y a que el organismo se beneficie de sus efectos positivos. La piperina es la sustancia que se encuentra en la capa externa del fruto de la pimienta negra, responsable de su sabor picante.
Así pues, siempre que se quiera consumir esta sustancia, debe estar en combinación con piperina.
La evidencia científica ha demostrado que un tratamiento de un gramo diario de curcumina de 8 a 12 semanas reduce los síntomas de la osteoartritis y tiene un efecto similar al ibuprofeno en la reducción de síntomas.